La repuesta es fácil, joven: He venido a hablarles de mi película, ya que Vds nomás pos son tan desagradecidos que ni siquiera la mencionan en su foro. Tanto hablar de Star wars y de Relouded y de mí nadie se acuerda. Mucho ahorita nos vemos y qué bueno que viniste, pero por qué no lo dijiste. Pues ya ven, ya lo dije. Así que chamacas y chamaquitos, pónganse changos nomás y dejen ya el relajo de bajarse tantas películas gringas y tanto quejarse de si no hay subtítulos o si los hubo... Ay Diosito, que punta de desagradecidos que son. Si yo fuera diputado es una película muy buena, como todas las mías, nomás que por ser antigua tiene pocos colores: sólo blanco y negro. El blanco soy yo... el blanco de los ataques de Don Ofelio y su pandilla de montoneros. La que tiene la negra es Doña Pelos, que es una mujer muy odiosa y no como mi Lupe.
Al principio, antes de ser diputado, que es esa cosa tan fea que cuando a uno le insultan le llaman hijo de diputado, soy peluquero, oficio duro y mal retribuído lleno de desagradecidos, como ese chamaco que viene un día y me dice:
- Me puede cortar el pelo más largo del lado derecho que del izquierdo, en capas de atrás, parado de en medio, que no se pueda acomodar de aquí, con un remolino de este otro lado y grafilado de enfrente?
-¡Híjole! Pues esta cabrón- le respondo al mancebo.
-¿Verdad que está cabrón güey ? ¡Pues así me lo dejaste la vez pasada, hijo tu pinche madre!
Total que ante tanta ingratitud me paso a la política, dedicándome a revisar los mercados públicos, donde unos pocos abusados explotan a los demás, así que le digo a un pollero:
-¿Y esos animales de dónde los sacaron?
-Pos, de donde los sacamos siempre.
-Pos será del basurero, porque no me va a decir que son guajolotes, más bien parecen zopilotes disecados. Mire nomás qué muslo; mire nomás qué buche, mire que no tiene ni buche. Mire usted nomás, ¿dónde está el gordo? ¿Dónde está la carne? Pero ni por aproximación, no hay pescuezo, pura rabadilla. Mire no más, mire no más qué mirada tan triste tiene.
-Pero si está muerto...
-Muerto de hambre, porque nunca comía el pobrecito, y no me le quiten todas las plumas porque le va a dar pulmonía.
Luego viene la campaña electoral, donde tengo que derrotar al marido de Doña Pelos, al que encuentro siendo objeto de una golpiza y para igualar la contienda, le doy nomás yo también algunos golpecitos. Y ¿qué creen que pasa entonces? Pos que la vieja ingrata se mete conmigo.
-A mí marido Vd. no lo pega.
-A poco, tiene Vd. nomás la exclusiva para pegarlo, doña Pelos.
Y bueno no sigo, porque no quiero espoilearles más el argumento, así que vean ya en YouTube la película y no sean tan pinches de no verla y de decir que si yo ya la tuve y no la retuve, pues es que estos gringos además de escribir mal, luego luego se quedan con tus películas. Porque uno no es mal pensado, pero tiene motivos. Porque primero vino Colón a América, dizque a descubrirnos. Se llevaron el oro, la plata, el cobre. Vamos, que nos dejaron sin un cobre. Y digo yo que estaba bien el descubrirnos, pero que algo más cubiertos ya nos podían haber dejado... Y eso que el que vino a México se llamaba Cortés y ya vieron lo que hizo. Si llega a llamarse Cabeza de Vaca, a poco acabamos todos corneados.
Y ahora después de Colón, estos chapetones hijos de la Madre Patria dizque han hecho una locuela secuela que se llama SI YO FUERA IMPUTADO y la protagoniza Marciano Rajoy. Pos ni modo, la mía es la buena nomás y descarten ahoritita mismo como quien dice, cualquier imitación, que ahí nomás está el detalle.
El trailer de SI YO FUERA IMPUTADO con Marciano Rajoy