El rey de los campos Eliseos
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Sinopsis:
Un aspirante a actor patoso no deja títere con cabeza en un teatro de los Campos Elíseos mientras un peligroso gangster idéntico a él se fuga de la cárcel…
Un aspirante a actor patoso no deja títere con cabeza en un teatro de los Campos Elíseos mientras un peligroso gangster idéntico a él se fuga de la cárcel…
Ficha artística:
Año: 1934
Duración: 67 min.
País: Francia
Director: Max Nosseck (supervisión de Robert Siodmak)
Guión: Arnold Lipp e Yves Mirande
Producción: Seymour Nebenzal para Nero Films
Música: Joe Hajos
Fotografía: Robert Lefevbre
Dirección artística: Jacques Laurent Atthalin
Reparto: Buster Keaton, Madeleine Guitty, Paulette Dubost, Raymond Blot, Jacques Dumesnil
Año: 1934
Duración: 67 min.
País: Francia
Director: Max Nosseck (supervisión de Robert Siodmak)
Guión: Arnold Lipp e Yves Mirande
Producción: Seymour Nebenzal para Nero Films
Música: Joe Hajos
Fotografía: Robert Lefevbre
Dirección artística: Jacques Laurent Atthalin
Reparto: Buster Keaton, Madeleine Guitty, Paulette Dubost, Raymond Blot, Jacques Dumesnil
Dos exilios convergen en París
1. A principios de 1933 Buster Keaton fue despedido de la MGM. Al igual que para muchas de las grandes estrellas del cine mudo, la transición al sonoro resultó una tortura para Keaton, que no logró adaptarse a los nuevos tiempos y sucumbió durante una temporada al alcohol. Al comenzar 1934 el gran icono del cine mudo sólo pudo encontrar trabajo en una pequeña productora: Educational Pictures.
2. Al mismo tiempo, en París iba creciendo la colonia de refugiados alemanes tras el acceso de Hitler al poder. Entre los exiliados figuraba Seymour Nebenzal, un norteamericano de origen judío-alemán. A finales de los años veinte Nebenzal fundó en Berlín la productora Nero Films, que financió buena parte de la obra alemana de Lang, Pabst u Oswald entre 1927 y 1933. En este último año, huyendo de los nazis, Nebenzal instaló Nero Films en París y se dedicó a financiar los trabajos de la colonia cinematográfica de exiliados centroeuropeos del nazismo, entre ellos su primo Robert Siodmak o Anatole Litvak. Un tipo interesante este Nebenzal. En Alemania produjo, entre otras lindezas, M, de Lang y La ópera de tres peniques o La caja de Pandora, de Pabst y Gentes del domingo, de Ulmer y Siodmak; en Francia dio trabajo y cobijo a numerosos exiliados y cuando partió hacia Estados Unidos, con la ocupación nazi de Francia, produjo las primeras películas americanas de Douglas Sirk: Hitler´s madman y Summer storm. Pero esta es otra historia…
3. Cuando Buster Keaton se quedó sin trabajo, Nebenzal le ofreció un contrato en Paris: el público europeo adoraba a Keaton y el productor le pagó 15.000 dólares por trabajar en El rey de los campos Elíseos. Así coincidieron en París el americano exiliado por el mercado y la innovación tecnológica, con los exiliados políticos procedentes de Alemania.
4. Nebenzal encargó la dirección de la película a Max Nosseck, otro director alemán exiliado que contaba con un par de películas. Quizá no se fiara en exceso de Nosseck y por eso encargó al ya curtido Robert Siodmak que ejerciera la plena supervisión del trabajo… Al igual que el resto de la colonia de exiliados alemanes, Nosseck partió hacia Estados Unidos en 1939, donde desarrolló una carrera con films de bajo presupuestos pero francamente interesantes, sobre todo en el ámbito del cine negro.
5. En el equipo técnico de esta película, como en todas los films franceses de Nebenzal, figuran especialistas franceses junto con exiliados del nazismo como el músico húngaro Joe Hajos o el guionista Arnold Lipp. Ambos trabajarían más tarde con otro alemán errante: Max Ophuls.
6. Sin duda, esta es una película peculiar, francamente curiosa. Keaton quiso que su personaje no hablara y al final alcanzó un pacto con Nebenzal: los diálogos fueron reducidos a su mínima expresión y doblados por un actor francés. Aunque Keaton no figura en los créditos como guionista, buena parte de los gags que desarrolla son versiones adaptadas al caso de gags de sus viejas películas: al fin y al cabo, eso es lo que el público francés quería ver…
7. Paramount se encargó de la distribución europea de la película… pero dadas las reticencias del público norteamericano a ver films realizados en otros países, la película jamás se estrenó en Estados Unidos… ¡Ellos se lo perdieron! Nosotros no. Ahora la podemos ver. Y a pesar de proceder de un viejo vhs, la copia esta vez no está nada mal…
2. Al mismo tiempo, en París iba creciendo la colonia de refugiados alemanes tras el acceso de Hitler al poder. Entre los exiliados figuraba Seymour Nebenzal, un norteamericano de origen judío-alemán. A finales de los años veinte Nebenzal fundó en Berlín la productora Nero Films, que financió buena parte de la obra alemana de Lang, Pabst u Oswald entre 1927 y 1933. En este último año, huyendo de los nazis, Nebenzal instaló Nero Films en París y se dedicó a financiar los trabajos de la colonia cinematográfica de exiliados centroeuropeos del nazismo, entre ellos su primo Robert Siodmak o Anatole Litvak. Un tipo interesante este Nebenzal. En Alemania produjo, entre otras lindezas, M, de Lang y La ópera de tres peniques o La caja de Pandora, de Pabst y Gentes del domingo, de Ulmer y Siodmak; en Francia dio trabajo y cobijo a numerosos exiliados y cuando partió hacia Estados Unidos, con la ocupación nazi de Francia, produjo las primeras películas americanas de Douglas Sirk: Hitler´s madman y Summer storm. Pero esta es otra historia…
3. Cuando Buster Keaton se quedó sin trabajo, Nebenzal le ofreció un contrato en Paris: el público europeo adoraba a Keaton y el productor le pagó 15.000 dólares por trabajar en El rey de los campos Elíseos. Así coincidieron en París el americano exiliado por el mercado y la innovación tecnológica, con los exiliados políticos procedentes de Alemania.
4. Nebenzal encargó la dirección de la película a Max Nosseck, otro director alemán exiliado que contaba con un par de películas. Quizá no se fiara en exceso de Nosseck y por eso encargó al ya curtido Robert Siodmak que ejerciera la plena supervisión del trabajo… Al igual que el resto de la colonia de exiliados alemanes, Nosseck partió hacia Estados Unidos en 1939, donde desarrolló una carrera con films de bajo presupuestos pero francamente interesantes, sobre todo en el ámbito del cine negro.
5. En el equipo técnico de esta película, como en todas los films franceses de Nebenzal, figuran especialistas franceses junto con exiliados del nazismo como el músico húngaro Joe Hajos o el guionista Arnold Lipp. Ambos trabajarían más tarde con otro alemán errante: Max Ophuls.
6. Sin duda, esta es una película peculiar, francamente curiosa. Keaton quiso que su personaje no hablara y al final alcanzó un pacto con Nebenzal: los diálogos fueron reducidos a su mínima expresión y doblados por un actor francés. Aunque Keaton no figura en los créditos como guionista, buena parte de los gags que desarrolla son versiones adaptadas al caso de gags de sus viejas películas: al fin y al cabo, eso es lo que el público francés quería ver…
7. Paramount se encargó de la distribución europea de la película… pero dadas las reticencias del público norteamericano a ver films realizados en otros países, la película jamás se estrenó en Estados Unidos… ¡Ellos se lo perdieron! Nosotros no. Ahora la podemos ver. Y a pesar de proceder de un viejo vhs, la copia esta vez no está nada mal…
Datos técnicos del ripeo:
Size: 916,443,876
Video bitrate: 1678
Video code: DivX 4 (OpenDivX)
Video dar: 1.360
Duration: 1:07:12
Video size X: 544
Video size Y: 400
Audio bitrate: 128
Audio codec: 0x0055 MPEG-2 Layer 3
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