Homenaje a Fitz y sus ripeos #6
Chantal Akerman, a Brussels-born and now Paris-based filmmaker, is world famous for her deconstructive style, pessimistic humor and corrosive observations of identity, sexuality, and politics. Akerman's films have been called the single most important and coherent body of work by a women director, and her film “Jeanne Dielman, 23 Quai du Commerce, 1080 Bruxelles” (1975) was praised by the “New York Times as ”the first masterpiece of the feminine in the history of cinema”. In addition to her many short and feature films, Chantal Akerman has produced documentaries and video installations. Among her most celebrated films are: Saute my ville (Blow up my town); News from Home; Les Rendez-vous d 'Anna; Je, tu, il, elle; Window Shopping ; Toute une nuit (All night long; Les Annèes 80 (The Eighties); Nuit et jour (Night and Day); D'Est (From the East; Portrait d'une jeune fille de la fin des annèes 60 à Bruxelles (Portrait of a Young Girl at the End of the1960s in Brussels); Un Divan à New York (A Couch in New York); and most recently, Sud; and La Captive. Her video installations, last exhibited at the Venice Art Biennale 2001 and Kassel Documenta 2002, and documentaries display an intensive personal gaze, most notably in Selfportrait / Autobiography: Work in Progress.
Chantal.Akerman.-.La.Chambre.avi (180 MB)La obra cinematográfica de Chantal Akerman es un referente del cine experimental europeo de los años 70. Desde el comienzo de su carrera a los 18 años, Chantal Akerman refleja a través de los numerosos y variados géneros abordados por la artista - documental, comedia, drama, musical - sus más personales inquietudes. Este es el caso de su opera prima Saute ma ville, 1968 rodada en la cocina de su casa e interpretada por ella misma, o de Jeanne Dielman 23 Quai du Comerce, 1080 Bruxelles, 1975. En ambos films Akerman trata el tema de la mujer. La familia, en películas como News from Home, 1976, Letters Home 1986 o Aujourdhui dis- moi/ dis moi 1980, es otro de los argumentos presentes de forma regular en su filmografía. En relación con la historia de su familia, el judaísmo y el éxodo, también marcarán la obra de la artista: Histoires d'Amérique 1988, D'est 1993. El marco del ámbito doméstico también es otro elemento característico de su obra en películas como La chambre 1972, Saute ma ville, 1968 L'homme à la valise, 1983 o Le deménagement, 1992. Formalmente el cine de Chantal Akerman también se aleja desde sus comienzos de las clásicas convenciones de espacio, tiempo y lugar, con films en los que la narración no está marcada por un principio o un final (Hotel Monterey, 1972 o D'est, 1993) o bien mediante la utilización de un ritmo temporal en el que los largos planos fijos se alejan de la elipsis cinematográfica, para a través de una cadencia cercana a la del tiempo real, reflejar el ritmo real del devenir de las cosas, los acontecimientos y las personas (News from home, Toute une nuit, 1982, Sud 1998/99).
Dentro de esta línea de trabajo en torno a la investigación formal del cine la artista se acerca a comienzos de los años 90 al video arte. El desarrollo que este tipo de manifestación artística venía experimentando desde los años 70 le abrirán nuevas vías de trabajo. D'est au bord de la fiction 1995 es la primera instalación de la artista. Desde esa fecha Akerman plantea una relectura de su cine a través de sus instalaciones. Este nuevo soporte le permite proseguir con sus investigaciones formales rompiendo por ejemplo con el desarrollo lineal de la imagen – D'est au bord de la fiction o From the other side- a través de la multiplicación de la imagen por el número de monitores que conforman estas piezas, o estableciendo un nuevo tipo de relación física entre el espectador y sus películas. El espectador que entra en la segunda sala de D'Est au bord de la fiction, mira y es mirado directamente a los ojos por los protagonistas del film –los monitores están dispuestos a la altura de la mirada del público- y en From the other side, en un símil del camino andado por los mejicanos que se atreven a cruzar la frontera, el espectador avanza entre imágenes que ilustran la tragedia de esta línea de separación. Por otro lado en Selfportrait: Autobiography in Progress, 1998 instalación construida a base de una selección de sus películas, yuxtapone y establece guiños entre los films que la componen, aportando de este modo nuevas lecturas y descubriendo nuevos significados de su obra cinematográfica. Desde From the other side se produce una evolución en las instalaciones audiovisuales de Chantal Akerman. Hasta la fecha Akerman concebía sus instalaciones exclusivamente a partir de sus películas ya realizadas. En el caso de From the other side va más allá ya que desde el primer momento en el que comienza el rodaje, Akerman pensó en una intervención que se añadiría al material de la película. La cineasta instaló una gran pantalla en la frontera sobre la que se proyectaron las últimas imágenes del film, anverso y reverso de una misma imagen/realidad, en función del lado de la frontera desde la que ésta fuera contemplada. Con Marcher à côté de ses lacets dans un frigidaire vide, 2004 Chantal Akerman sigue introduciendo nuevos elementos en sus instalaciones ya que en ésta utiliza una película creada específicamente para la pieza. Además esta obra, compuesta por varias proyecciones de la película también incluye una gran escultura en tul, elemento éste, el escultórico, ausente hasta entonces en las instalaciones de Akerman.
La película De l'autre côté film en el que se basa la instalación From the other side es el último documental de lo que se ha transformado en una trilogía de documentales junto a D'Est y Sud (1999). En ellos Chantal Akerman trata asuntos concretos como la caída del bloque comunista en Europa, el racismo en el sur de los EEUU o el problema de la frontera entre Méjico y EEUU. Todos ellos reflejan realidades contemporáneas pero recuerdan episodios históricos en los que las fronteras o el enfrentamiento entre culturas y/o religiones condujeron hacia otras tragedias. En esta trilogía de documentales Chantal Akerman intenta acercar al espectador a una determinada historia pero siempre evitando los juicios de valor.
La instalación From the other side basada en la película De l'autre côté fue concebida para la Documenta de Kassel de 2002 y propone un recorrido estructurado en tres partes. ”En la primera sala un monitor reproduce en bucle el último plano de la película: la cámara situada en el interior de un coche, recoge imágenes nocturnas de una autopista americana, mientras la voz de Chantal Akerman lee un texto sobre la desaparición de una mujer mejicana que trabajaba en Estados Unidos. [...]. En la sala central seis trípticos compuestos por monitores multiplican la imagen de la frontera y prolongan la mirada del espectador sobre ésta, planteando el sin sentido y la violencia de una barrera que deja que todo se cuele -viento, polvo, animales...- todo, excepto a los hombres. Por último en la tercera sala una pantalla se proyecta en el interior de otra pantalla. "Colocamos una pantalla de diez metros de base en la frontera del desierto de Arizona entre dos montañas, una norteamericana y la otra mexicana. Sobre esta pantalla proyectamos los últimos minutos de la película De l'autre côté [...] y lo filmamos ". Se trata de una gran paradoja: la imagen se inscribe en el paisaje desértico al mismo tiempo que se desvanece con la llegada del día. Esta desaparición de la imagen se puebla de sueños rotos. Los sueños de hombres y mujeres, vivos y muertos, en busca de una vida mejor”
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