Bueno, creo que fue un servidor quien se aventuro a mencionar a Loach como otra posible mirada, muy distinta, de la historia que nos ofrece Kaurismaki. Fue una propuesta consciente para contraponer dos maneras de entender el cine.
Lo que sorprende en el, voy a llamarlo, estilo de Kaurismaki es la desnudez de su propuesta. Los elementos que nos presenta son tan minimos que convierte casi en una mision imposible la identificación, en terminos afectivos, del espectador con sus personajes (de aquí mi inicial idea de distanciamiento con la historia). Esto desorienta completamente al espectador que se aproxima por primera vez a Kaurismaki, Tanto “La Chica…” como “Nubes pasajeras” y “”El hombre sin pasado” las vi en diferentes ediciones del Festival de San Sebastián con las salas a rebosar de un publico muy variopinto (algo habitual en las proyecciones del Festival, las salas se llenan de gente que en muchas ocasiones no las pisan durante el resto del año …). Al igual que le sucedió a kimki con sus amigos yo tambien fui de testigo de grandes carcajadas en los momentos mas dramaticos de la película. Recuerdo especialmente la escena en que Iris elimina, en un acto de total deshumanización, al desconocido que se le acerca en el bar …. en mi opinión el acto mas terrible de la película (alguien ha mencionado el nihilismo como motor de la historia) y que fue aplaudido con gran alborozo ….
Un director “tramposo”, al estilo de Loach, nunca arrancara este tipo de reaccion del publico en estas situaciones si no todo lo contrario, el publico respondera horrorizado. Para ello basta con ir manipulando adecuadamente las emociones del espectador a traves de todos los resortes a disposición del director … una de las películas de Loach que me indigno hasta la nausea por este motivo es “Ladybird, Ladybird”.
Una película igualmente tramposa y con un desenlace similar es “La piscina” de Jacques Deray. Al final asistimos a un cruel asesinato, sin motivos y totalmente inesperado … pero en esta ocasión el director casi consigue que el espectador se convierta en “complice” del asesino, que llegue a considerar apropiada su conducta y que mantenga la esperanza de que este logre esquivar cualquier castigo … claro que es mas facil identificarnos, o sentir mas simpatias, por el bello Alain Delon que por una chica tan triste como Iris.
Kaurismaki. se limita a colocar bajo su camara las vidas de sus personajes, con pocos datos mas que los de un presente sombrio, y sin tomar ningun tipo de partido. Nos exige un esfuerzo como espectadores para comprender el alcance de los actos que nos presenta. Creo que en esto radica la honestidad del director.
Iris no es ningun monstruo aunque vive rodeada de ellos, conserva un anhelo de felicidad que la diferencia de los demas y consigue humanizarla.
Iris se convierte en victima en el momento en que pierde su humanidad. Es entonces cuando pasa a ser juez y verdugo, alcanzando el mismo rango del resto de personajes. En su caso la sentencia es de muerte….
Saludos.
Pd: Nunca imagine que el "gelido" Kaurismaki pudiese servir de base para tan acalorado y provechoso debate. Sigan asi.